N u e s t r a h i s t o r i a

Somos una empresa familiar vinculada a la agricultura por más de 40 años en el valle del Aconcagua, producto del trabajo de nuestro padre Julio Ernesto Zenteno V. Quien se vinculó desde muy joven con la actividad agrícola y ganadera. Inicialmente, fue un gran colaborador de su padre. Cuando tuvo la experiencia y la capacidad económica necesaria, se independizó
Nuestra historia
Q u i e n e s S o m o s


Posteriormente contrajo matrimonio con nuestra querida madre la señora Clara Ramírez M, con la cual con sacrificio y esfuerzo adquirieron los predios de Las Casas, Santa Griselda, Santa Clara, El Molino, El Sauce y Don Erne. Todos ubicados en la provincia de Los Andes.


M i s i ó n

Como AGRICOLA DON ERNESTO LTDA, nuestra misión es mantenernos unidos y seguir las huellas que nos dejaron nuestro padre don Ernesto Zenteno V. y nuestra madre la señora Clara Ramírez M y comprometernos a conservar y producir fruta fresca de buena calidad, bajo los exigentes requerimientos de los mercados internacionales, introduciendo la tecnología para mejorar los productos terminados.
AWARDS
I t a l y ' s M o s t R e c o g n i z e d W i n e r y






Equipo de trabajo
C o n o z c a a n u e s t r o s c o l a b o r a d o r e s

Nelton Herrera G.
Cargo

Cristian Retamales Z.
Cargo

Omar González G.
Cargo

Luis Páez M.
Cargo
Milestones
O v e r F i v e D e c a d e s o f H i s t o r y

1967
The Beginning
1968
Building the Winery


late 70-ies
New Sorts in the Vineyard
1979
First Art Events


80-ies
New Sorts in Vineyards
1979
First Art Events


sustainability
M i n d f u l n e s s o f t h e E n v i r o n m e n t

As part of the agricultural industry, we fully depend on our surrounding, just as it depends on us. That’s why we grow our produce organically and sustainably. Over the past decades the carbon footprint of the winery has been positive, which is something we’re really proud of.


As part of the agricultural industry, we fully depend on our surrounding, just as it depends on us. That’s why we grow our produce organically and sustainably. Over the past decades the carbon footprint of the winery has been positive, which is something we’re really proud of.